Estuvimos un año buscando el sistema para producir el documental. Hice un teaser (como diría J.J. Millás, «que coño querrá decir teaser«) y viendo que era para mi muy complicado conseguir una producción previa, nos lanzamos Rosa y yo a correr con los gastos del rodaje. Un buen amigo, Romà Guardiet, colaboró dejándome su cámara Sony A1-E, cámara que yo me atrevía a manejar con unas mínimas garantías (no soy un operador profesional). El día 20 de noviembre del 2009 Eulalia preparó una cena con todas las personas de Ossera que luego saldrían en el documental, En esa cena, junto con Georgina Vila y Enric Canut (incitadores y promotores) expliqué el proyecto y visionamos juntos ese apunte de imágenes y música que yo había preparado (el teaser de las narices!). Todos se mostraron interesados y aprobaron el proyecto, colaborando con el alojamiento y manutención del mini-equipo de rodaje, a sabiendas que las visitas serian espaciadas (a lo largo de las estaciones) y como mínimo, un año.
Esta implicación de los participantes nos dio un aporte personal a nuestra relación con todos ellos, entrando en sus casas y conviviendo…dos años mas tarde (eso duró el rodaje, hasta septiembre del 2011, con un total de 10 estancias) la relación de amistad y de confianza ha sido el regalo más grande de todo el proyecto.